domingo, 4 de enero de 2015

Videogame´s Big Challenge 2014

Otro año más, otro reto más. Superado ya desde hace varios días 2014, es hora de hacer recuento de lo que supuso jugabilísticamente hablando. Este año me complace anunciar que he superado el número de títulos acabados de ediciones anteriores. La lista es la siguiente:

Rogue Legacy (PC)
Hammerwatch (PC)
Warhammer 40.000: Dawn of war (PC)
Strikers 1945 III (Arcade)
Unepic (PC)
To the moon (PC)
Steamworld Dig (PC)
Violent Storm (Arcade)
Hotline Miami (PC)
Doom 3 (PC)
Toy Soldiers: Cold War (X360)
Afrika Korps vs Desert rats (PC)
The Dig (PC)
Valiant Hearts (PC)
Command and Conquer Generals: Zero Hour (PC)
Saint Rows The Third (X360)
Red Dead Redemption (X360)
Company of heroes (PC)
Company of heroes – Opposing Fronts (PC)
Super Smash Bros (N64)
Darkest of days (PC)
Spec Ops The Line (PC)

No son demasiados en cualquier caso. El año empezó terminándome a los pocos días de empezar: Rogue Legacy, una mezcla de arcade de plataformas con roguelike en el que manejamos a una estirpe de caballeros en su intento por desentrañar los secretos de un mágico castillo cuya estructura cambiará cada vez que nos introduzcamos en él. A decir verdad ya había comenzado a jugarlo en 2013 así que tenía casi todo el trabajo hecho. Es un juego de duración media que puede continuar jugándose una vez acabado, aunque habiendo tantos títulos ahí fuera esperándonos, retomarlo se hace cosa de auténticos fans.

En paralelo había comenzado a jugar a HammerWatch, heredero espiritual de los Gauntlet viejunos en el que atravesamos enormes mazmorras repletas de tesoros, secretos y enemigos. Lo mejor es que viene con un editor que le aporta una rejugabilidad que de por si solo no tiene. Warhammer fue un descubrimiento para mi, un juego de estrategia con una mecánica que no había probado nunca y que comparte en ciertos aspectos con Company of Heroes y su secuela, que probé meses después.

Con los arcades emulados con MAME: el shoot´m´up Striker 1945 y Violent Storm, un beat´m´up de ambientación postapocalíptica y banda sonora rockera, me distraje un par de horas antes de poner mis manos sobre Unepic, que había estado instalado en mi PC desde hacía tiempo pero que hasta entonces no me había llamado demasiado. Es un sorprendente metroidvania español con múltiples referencias a la cultura popular y chascarrillos a granel que no dejo de recomendarte.

To the moon hizo que se me saltaran las lágrimas, he de reconocerlo. Nunca pensé que un juego realizado con RPG Maker pudiera alcanzar tan altas cotas de profesionalidad y que su guión, muy alejado de la enésima salvación del mundo, fuera tan emocionante.

Otra producción "indie" cayó en mis manos de nuevo: Steamworld Dig, un juego en el que controlando un robot minero deberemos cavar galerías en busca de fama y fortuna, algo corto y fácil para mi gusto pero que disfruté con creces.

Fue tan buena la experiencia con los desarrollos alejados de las grandes corporaciones de la industria que me decidí a probar Hotline Miami, un frenético arcade con toneladas de sangre, toques de planificación y música trance que nos ayudará a concentrarnos a la hora de acabar con estilo y ritmo con todos los que se nos pongan por delante.

Encontrar unos viejos CDs olvidados en mi armario hizo que volviera a jugar a dos clásicos atemporales, el fps Doom 3 y el juego de estrategia en tiempo real Afrika Korps vs Desert Rats que ya me había terminado en su época.

Gracias a los regalos de Xbox Live Gold pude terminar Toy Soldiers: Cold War, un "tower defense" con toques de acción que me duró un par de tardes. En los mencionados CDs hallé The Dig y me decidí a finalizarla a cualquier precio, aunque este fuera tener que echar mano de una guía más veces de las que me hubiera gustado, aunque su dificultad no era muy alta.

De nuevo con Valiant Hearts, la historia interactiva de estética cartoon ambientada en la primera guerra mundial, se me saltaron las lágrimas, que desaparecieron en cuanto aplasté a mis enemigos en C&C Generals: Zero Hour, la expansión del recordado RTS.

Sendos títulos de X360 me esperaban para ser derrotados, el sandbox Saint Rows III y el también sandbox Red Dead Redemption, con los que pasé menos horas de verano las que me hubiera gustado. Una vez hubo que guardar el bañador decidí probar Super Smash Bros de N64 aprovechando que había descargado un romset de dicha consola. Más tarde desenterré de lo más profundo de torrent un juego que no me dejó indiferente: Darkest of Days, un fps atípico en el que las armas automáticas son las menos y con una historia repleta de saltos temporales.

Ya en los últimos días del año cayó Spec Ops The Line: juegazo sin una sola pega más que su brevedad. Y en fin, jugué a muchos otros más pero de forma más o menos errática, por ello, queda abierto el Videogame´s Big Challenge 2015. ¿Seré capaz de batir la marca de 22 juegos terminados de este año? ¡Lo veremos en doce meses!

0 comentarios:

Publicar un comentario

Speak freely, friend.

Backside Games Studios

Backside Games Studios © 2014 - Designed by Templateism.com, Plugins By MyBloggerLab.com | Published By Gooyaabi Templates